Una correcta hermeticidad en la envolvente de un edificio debe impedir el paso incontrolado del aire para poder así cumplir con todos los estándares de eficiencia energética que implica la construcción de viviendas bajo el sello Passivhaus. Por ello es imprescindible utilizar materiales de alto rendimiento que nos garanticen el correcto funcionamiento y la hermeticidad óptima durante la vida útil del edificio.
Pruebas de hermeticidad:
La garantía de una vivienda Passivhaus
Test de Blower Door
La hermeticidad de un edificio se mide mediante el test de Blower Door. Esta prueba nos permite conocer el valor n50 que define la hermeticidad al aire según la UNE EN 13829:2003.
Consiste en un ventilador colocado en una puerta o ventana exterior creando una diferencia de presión de 50 Pa. La envolvente exterior del edificio debe tener un resultado de la prueba de la presurización según EN 13829 inferior a 0.6 renovaciones de aire por hora (valor de estanqueidad 50 Pa).
UNA CORRECTA
HERMETICIDAD:
- Reduce el riesgo de condensaciones intersticiales
- Reduce las pérdidas energéticas
- Evita la entrada de agentes agresivos exteriores o contaminación
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